Lugares de Interés

Lugares de Interés
Iglesia de San Bartolomé Apóstol

 Consta de una nave única que se separa de una larga cabecera con ábside poligonal mediante un arco de medio punto, que da paso a una bóveda de dos tramos. El primero, desarrollado con bóveda de cañón y lunetos, separado por un arco fajón apoyado en ménsulas y el segundo con bóveda de paños. Una capa de cal impide observar el tipo de fábrica empleada, que, por otra parte, en el resto del edificio es de mampuestos irregulares, salvo en la espadaña, contrafuertes y esquinas, donde se emplea el sillar labrado de granito. El exterior del edificio es de sobria arquitectura, con contrafuertes exteriores que enmarcan dos puertas laterales abiertas con un sencillo arco de medio punto. La fachada del coro tiene un defecto apreciable de construcción, visible en la línea de impostas del bajo muro, que aparecen ligeramente inclinada respecto al nivel de la calle. El templo parroquial tiene dos construcciones diferenciadas por el tiempo: el templo propiamente dicho y la torre campanario, edificación aneja, igual que la sacristía, a la cabecera de la iglesia. La torre mencionada es de planta cuadrada con dos cuerpos y remate piramidal. Fue construida un poco antes de la instalación del reloj en 1924, y se halla rematada por un forjado de hierro al que se sujeta una campana. El campanario sustituyó a una espadaña levantada en el hastial del coro, sobreelevada mediante un podio que sirve de quicialera a los dos vanos de medio punto y a un tercero con el mismo sistema de arco situado por debajo del piñón, acentuado, además, por un remate de bola herreriana con cruz de hierro. Cronológicamente pensamos que la torre se sitúa en la segunda mitad del s. XVI igual que la mayor parte de la obra eclesial. La nave se cubre con techo de madera de par y nudillo con el arrocabe liso y tirantes. La cabecera ochavada que conoció Oxea con artesonado de planta octogonal y lazo de ochos; desapareció seguramente durante algunas de las reformas que han sufrido las iglesias en los últimos 15 años. El coro balaustrado de madera sustentada por dos columnas formadas por cilindros torneados y rematados en cono. Carece de retablo mayor y de imágenes antiguas, por la misma causa que otras iglesias del término, únicamente merece destacar el hecho de que en el armario de la sacristía se guardan dos inscripciones de Talavera la Vieja, una funeraria y otra falsificada con la intención de demostrar que los santos Vicente, Sabina y Cristeta, sufrieron martirio en la localidad de Talavera la Vieja. Fuente: Arjabor.